Kinsale
Moderation, we find, is an extremely difficult thing to get in this country.
Después de la noche en la que todo cerraba a las 12 y como Cenicienta nos retiráramos a nuestros aposentos, el día de hoy se presentaba bonito.
Hemos desayunado en Liberty Grill, una cola de 10 personas, eso sí. Pero he probado, por fin, el mejor Brunch de Cork. Era verdad, increíble. He vuelto a llorar un poquito por dentro de la emoción.
Una vez desayunados, hemos puesto rumbo a Kinsale, un pueblo costero a 30km de Cork, precioso. Me contaban que debe tener mucho parecido a algunos pueblos en Nueva Zelanda, pero no lo sé porque no he estado. A mí me ha recordado mucho a un Zumaia meets Las Landas pero con más viento del necesario. Pero así es Irlanda.
Hemos recorrido el pueblo en poquito tiempo y aunque el brunch había sido suculento, teníamos hambre. Mi jefa me había recomendado un restaurante en el puerto que se llama Fishy Fishy, y ahí hemos ido. Producto local, fresco, pescado por la gente del restaurante, una maravilla, señora.
No sé si os he contado que hoy no se bebe en Irlanda, que todo son fiestas en casa porque los pubs no abren. Bien, pues nos hemos pimplado una botella de Albariño. Las buenas costumbres no hay que perderlas.
Como siempre, ahí van las fotos