Un Domingo Cualquiera

Soy más donostiarra que la barandilla de La Concha, pero a los 25 años salí de allí para no volver - de manera permanente y de momento.
En 2015 me mudé a Irlanda por un cúmulo de casualidades. El cúmulo de casualidades: me rechazaron en el que creía el trabajo de mi vida en Manchester en el último momento.
Pero como una aparición Mariana, tras una oferta en Perú y otra en Argentina, me llegó una luz desde Cork (the Real Capital of Ireland). Hice tres maletas y me fui para seis meses, que se convirtieron en ocho y finalmente en tres años en Irlanda.

Podría decir que me cambió la vida mucho y nada. Realmente cambié yo.
En el blog no escribo de manera regular, pero cuando escribo lo hago con cariño. Escribo sobre todo sobre cosas chorroncias, amores que no fueron, o que lo fueron y terminaron. También sobre los que nunca llegaron a empezar. Se parece a mi Fotolog de 2004, pero sin tantas evidentes indirectas. Un poco como una cinta grabada de la radio con mucho cariño para muchas personas a las que he querido y quiero.